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Nuevas tendencias arquitectónicas y artísticas, una gastronomía excepcional, un centro histórico precioso y una identidad única son los atributos de una de las ciudades más interesantes del norte de España: Bilbao. 

Importante centro industrial y marítimo del País Vasco, Bilbao es sobre todo un destino que ha sabido transformar su tejido urbanístico y apostar por la cultura como tarjeta de presentación. El Museo Guggenheim, diseñado por Frank O. Gehry, se ha convertido en el símbolo de la ciudad y el hogar de una de las exposiciones de arte contemporáneo más aclamadas del mundo. Además, muchos otros arquitectos de renombre internacional han dejado su firma aquí, como Santiago Calatrava y su puente de Zubizuri, con forma de velero y un espectacular suelo de cristal, o Norman Foster y sus ultramodernas estaciones de metro.

Pasea por las animadas calles del Casco Viejo, el centro histórico de Bilbao, admira sus emblemáticos edificios y lugares de interés, como la Catedral de Santiago, la Plaza Nueva o la Basílica de Begoña, y piérdete por sus mercados, sobre todo el de la Ribera, para disfrutar del ambiente cosmopolita y el fascinante contraste entre tradición y modernidad que caracteriza a Bilbao. Otras experiencias imprescindibles son un paseo en barco por las aguas de la ría de Bilbao, el fiordo urbano formado por el encuentro entre el río y el océano, y una excursión para descubrir las impresionantes playas de fácil acceso desde la ciudad, como las de Sopela, Ereaga o Plentzia, perfectas tanto para relajarse como para hacer surf.

Bilbao también destaca por su gran vitalidad gastronómica y, de hecho, la cocina vasca se sitúa entre las más reconocidas del mundo. En la ciudad hay infinidad de opciones para todos los gustos y presupuestos: desde galardonados restaurantes hasta pequeños bares de pintxos, las tapas típicas vascas. Cada rincón de Bilbao está repleto de propuestas deliciosas.

Bilbao es un destino muy agradable que se puede visitar durante todo el año gracias a la influencia de la corriente del Golfo, que suaviza las temperaturas. La época ideal para planificar un viaje a esta zona del País Vasco es de mayo a octubre, cuando las lluvias son menos frecuentes.