VUELOS A LYS para el otoño desde solo

 

Estratégicamente construida en la confluencia de los ríos Ródano y Saona, Lyon es una ciudad elegante y dinámica que enamora a los viajeros gracias a su mezcla de historia, cultura, gastronomía y vida nocturna. Piérdete por los barrios antiguos de Fourvière, Vieux Lyon, Croix Rousse y Presqu'ile, declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y descubre los excepcionales museos de la ciudad, como el Museo de Bellas Artes, el Musée des Confluences, un verdadero archivo multidisciplinario de la historia de la humanidad, o el Musée Lumière, dedicado a los dos hermanos creadores del séptimo arte, nacidos en Lyon. Y después de todo este esplendor, toca disfrutar de un almuerzo o una cena en uno de los típicos bouchons, acogedores mesones que sirven deliciosas especialidades locales. ¡Por algo Lyon se considera la capital gourmet de Francia!

Te recomendamos que comiences tu visita a Lyon desde la colina de Fourvière, un punto privilegiado desde el que admirar una fantástica panorámica de la ciudad y que además contiene algunos de los principales atractivos históricos y culturales de Lyon: el teatro galorromano, el teatro romano más antiguo de Francia, su museo, la Basílica de Notre Dame y, al pie de la colina, la Catedral de Saint Jean en la zona de Vieux Lyon, donde también podrás explorar sus traboules, estrechos pasajes peatonales que atraviesan edificios y patios privados. Si te gusta el arte callejero, no te puedes perder el Mur de Canuts, el mural más grande de Europa, que muestra escenas de la vida cotidiana del barrio de Croix Rousse.

Además de los hermanos Lumière, en Lyon nació otra importante figura cultural: Antoine de Saint-Exupéry, conocido en todo el mundo por ser el autor de El Principito. Se puede admirar una estatua en su honor en la céntrica Place Bellecour, punto de encuentro para los jóvenes lyoneses junto con la Place des Terraux, otra plaza imprescindible, especialmente por la tarde-noche, cuando la iluminación la hace todavía más impresionante. 

Para poder apreciar tranquilamente todo lo que Lyon tiene para ofrecer, te recomendamos que pases al menos un fin de semana en la ciudad. La mejor época para visitar este destino es desde principios de junio hasta finales de septiembre, o durante el puente del 8 de diciembre, cuando tiene lugar el maravilloso Festival de las Luces.