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La isla de Zante, la tercera más grande del archipiélago de las Jónicas, es uno de los destinos griegos más populares entre los viajeros. El motivo es muy simple: los amantes del mar encuentran aquí un auténtico paraíso repleto de playas fantásticas, entre las que se encuentra, probablemente, la más famosa del mundo, la playa del naufragio. Pero la costa no es el único atractivo para los turistas: Zante cuenta con una naturaleza exuberante, clima templado todo el año, una gastronomía local realmente deliciosa, y una vida cultural y nocturna muy animada. Pese a su merecida popularidad, Zante también conserva su carácter reservado y reflexivo que cautiva a quienes prefieren los entornos idílicos y aislados.

Empieza a explorar la isla con un recorrido por su capital, la bella ciudad de Zante, donde podrás relajarte en el paseo marítimo o en la céntrica plaza de Solomos, o bien admirar las vistas que ofrece la fortaleza de la colina de Bochali, testimonio del dominio veneciano en la zona. Desde aquí, puedes salir a descubrir playas maravillosas, como la de Gerakas, donde se pueden ver tortugas marinas, o la de Limnionas. Si prefieres los acantilados vertiginosos a la arena fina, puedes visitar la bahía de Xigia, conocida también por sus aguas sulfurosas. La elección del alojamiento en Zante dependerá, en gran medida, del tipo de vacaciones que tengas en mente: Laganas es para aquellos que quieren salir de fiesta hasta bien entrada la noche, mientras que Alykes es perfecta para las familias. Por otro lado, Agios Nikolaos es el punto más septentrional de la isla y desde aquí salen los barcos hacia la cercana Cefalonia.